El imaginero zamorano con ascendencia leonesa, Ricardo Flecha Barrio, inauguraba el pasado 2 de febrero las VII Jornadas de la Biblioteca Cofrade de la Bienaventuranza con la conferencia titulada “XX aniversario de Nuestra Madre de la Piedad”.
Comenzó Flecha realizando un recorrido histórico-artístico sobre la iconografía de la Virgen de la Piedad, la representación de Cristo en brazos de su Madre; un momento del que –apuntó el imaginero– no hablan los evangelios.
A continuación, prosiguió su intervención recordando el proceso de creación de la Virgen de la Piedad de la Bienaventuranza, que él mismo esculpió –se cumplen en 2018 veinte años– en madera de cedro; una imagen que quiso cumpliera tres condiciones –importantes, a su modo de ver, en todas las Piedades–: que la Virgen tuviera a Cristo en su regazo; que, con sus brazos, intentara taparle las heridas; y que estuviera en disposición de acercar su cuerpo para besarle.
Ya para finalizar, Ricardo Flecha concluyó explicando en qué había consistido el proceso de restauración que él mismo ha llevado a cabo en su taller hace escasas fechas.